Debe ser un ejercicio de máxima preocupación para promotor o propietario, la elección del técnico competente idóneo. Le aconsejamos que en el conjunto de los factores para su elección valore el contenido del certificado, asegurándose que este le permita vender o alquilar su inmueble con la certeza de estar ofreciendo la mejor imagen de su producto, con la intervención y contenidos de un profesional de la edificación que aporte calidad, profesionalidad y responsabilidad como un argumento más a su favor para realizar la operación.

Tenga en cuenta que para certificar un inmueble es necesario recopilar datos relativos a la ubicación, año de construcción, características constructivas, equipos de climatización y agua caliente sanitaria, potencias, características de rendimiento, uso de las instalaciones, etc. Realizada la visita o visitas pertinentes y recopilados todos los datos, hay que interpretar y procesar la información en el programa informático habilitado a tal efecto. Requiere por tanto unos tiempos adecuados en función de la complejidad del inmueble.

Desconfíe de ofertas con truco o trampa, de la economía sumergida, de la falta de habilitación, de la inexistencia de toma de datos, pruebas y comprobaciones necesarias, o de aquellos no conocedores de la edificación que pretenden introducirse aprovechando la coyuntura.

Igualmente considere que la garantía y responsabilidad es del técnico que suscribe, no de intermediarios.